Los champiñones se consumen muchísimo, es una de los hongos más consumidos, y, normalmente, una vez limpios se guisan de la forma que vayamos a hacer nuestro plato, ya sean a la plancha, rellenos, al ajillo, en revueltos, y muchos más platos. Pero los champiñones tienen un problema, que si nos los utilizas de inmediato se van oscureciendo, pues para conseguir de nuevo que tengan esa blancura, y mucho más, los pelaremos.
Con estos pasos que os dejamos y con las fotos os va a resultar muy fácil. Antes deciros que los champiñones se dividen en tres partes: sombrero (la parte más carnosa), pie o estipe (es la parte que sirve de apoyo al sombrero) y el himenio (la parte inferior del sombrero, que tiene como unas laminillas y aquí es donde están las esporas).
Primero les quitamos la base al pie, que suele tener mucha tierra y lavamos los champiñones.
Una vez hecho este paso comenzamos a pelarlos con ayuda de un cuchillo pequeño, desde la parte inferior, himenio, hacia arriba, el sombrero, se aprecia muy bien en las fotos.
Y también vemos como quedan de blancos. Después los utilizaremos o cortaremos como prefiramos para hacer nuestro plato.
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